El World Economic Forum (WEF) se hace eco de una encuesta llevada a cabo por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), destacando que más de un tercio de los jóvenes ve con optimismo el futuro, a pesar de haber sufrido más severamente algunos de los impactos provocados por la crisis del Covid-19, como pueden ser la pérdida de oportunidades o la disrupción del mercado laboral y de su situación académica.
La encuesta, realizada en jóvenes de 18 a 29 años en más de 112 países es la base del informe de la OIT “Global Survey on Youth & COVID-19”, muestra cómo los jóvenes están comprometidos y tienen el objetivo de construir un futuro post Covid mejor para todos, más seguro, inclusivo e igualitario.
En este sentido, es destacable que la mayoría de los jóvenes encuestados estuvieron a favor del confinamiento para proteger a los trabajadores y los negocios y que uno de cada cuatro realizó donaciones y participa en actividades de voluntariado en respuesta a los efectos de la crisis del Covid-19.
Todo ello a pesar de que en el plano académico y laboral, según los datos del informe, su situación se ha visto afectada negativamente:
Para evitar que estos impactos se alarguen en el tiempo, el informe recomienda diversas medidas como pueden ser: la adopción de políticas de empleo específicas que garanticen trabajos dignos y una formación adecuada para la juventud, incrementar la protección social y los beneficios por desempleo en este colectivo, reforzar la formación online o prestar mayores servicios de apoyo psicosocial.
Filtrar resultados
Según Kristalina Georgieva, directora gerente del FMI, para impulsar el crecimiento se necesitan tres cosas: mejorar la regulación para dinamizar la iniciativa privada, profundizar la integración regional y prepararse para aprovechar el potencial de la IA.
Según The European House–Ambrosetti, la UE tiene una oportunidad de impulsar competitividad y crecimiento a través de la simplificación normativa y supervisora, sobre todo en materia de sostenibilidad y en el sector financiero.
Según Ramón Casilda Béjar, España, en el complejo panorama geopolítico actual, tiene la oportunidad de fortalecer su rol como puente entre Iberoamérica y la UE, revitalizando inversiones en las dos direcciones.
Según el @ECB, en episodios de crisis, se recurre al efectivo como reserva de valor fiable y medio de pago resiliente, lo que resalta su papel crucial más allá de su relevancia en las transacciones diarias de pagos.
Según Juan S. Mora-Sanguinetti, en España un aumento del 10% en el volumen de regulación provoca una caída del 0,5% en el empleo de las empresas con menos de 10 trabajadores.
Según Hélène Rey: “En un mundo donde las stablecoins, en particular aquellas vinculadas al dólar, se conviertan en una herramienta de pago global importante, debemos prepararnos para consecuencias de gran alcance”.
@judith_arnal propone reformas para que la UE avance en la simplificación regulatoria, empezando por consensuar qué significa, con la competitividad como pilar, además de mecanismos de coordinación y un rediseño de la gobernanza.
Según @iee_org, España es uno de los entornos fiscales más exigentes para las empresas dentro del contexto europeo e internacional, lo que puede tener implicaciones relevantes en competitividad, atracción de inversión extranjera y expansión.
Según un informe reciente publicado por CEPS, los reguladores financieros europeos deberían adoptar la competitividad como un objetivo secundario formal, siguiendo el precedente establecido por la Financial Services and Markets Act de 2023 en Reino Unido.
Según la OCDE, las pymes y start-ups que crecen rápidamente contribuyen decisivamente a la creación de empleo, el crecimiento económico y la competitividad. Las de alto crecimiento (un tercio en tres años) generan tanto empleo como las grandes empresas.
Según Christine Lagarde, para que el euro gane en relevancia internacional, Europa debe dar pasos decisivos completando el mercado único, reduciendo las cargas regulatorias y construyendo una sólida unión de los mercados de capitales.