Banco Santander obtuvo un beneficio atribuido de 1.840 millones de euros en el primer trimestre de 2019, un 10% menos que en el mismo periodo del año anterior (-8% en euros constantes), debido a un cargo neto de 108 millones de euros con motivo de la venta de activos y reestructuraciones. Este cargo incluye 150 millones de euros de plusvalías por la venta de la participación del 51% de Prisma en Argentina y 180 millones euros de pérdidas derivadas de la venta de una cartera de inmuebles residenciales en España, más un cargo de 78 millones de euros por los costes de reestructuración en Reino Unido y Polonia.