La inclusión educativa es fundamental para garantizar el progreso de las personas. Para conseguirlo, en la Fundación Universia, con el apoyo de Santander, lanzamos la campaña #SOMOS, una acción a nivel global por la educación superior igualitaria y de calidad.
 

Conseguir que los estudiantes con discapacidad tengan las mismas oportunidades que el resto es clave para el futuro de la sociedad. Por eso, desde la Fundación Universia, con el apoyo de Santander, buscamos un cambio real que permita eliminar las barreras arquitectónicas, sociales y tecnológicas que existen para que las personas con discapacidad tengan acceso a una educación universitaria de calidad e inclusiva.

Para lograrlo, lanzamos la campaña #SOMOS, donde promovemos la adhesión al manifiesto ‘La clase somos todxs’, que persigue hacer frente a los desafíos educativos que proponen los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU para la Agenda 2030 en materia de Educación. 

El Manifiesto lo hemos elaborado desde Fundación Universia con el apoyo de María Soledad Cisternas, expresidenta del Comité de Derechos de Personas con Discapacidad de Naciones Unidas y enviada especial del Secretario General de Naciones Unidas sobre Discapacidad y Accesibilidad. 

Para Sonia Viñas, directora de la Fundación Universia, “es importante hacer frente a los desafíos educativos de la Agenda 2030, que nos invita a liderar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 (ODS 4): garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover las oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todas las personas”.

Reivindicando una universidad inclusiva de calidad 

Con la iniciativa #SOMOS pretendemos alzar la voz por una educación inclusiva y, en particular, para apoyar la igualdad en la comunidad universitaria. Porque, como aseguran los responsables de la campaña: “Muchos estudiantes con discapacidad viven en el aula la distancia con el resto de sus compañeros, afectando a su autoestima y en general a la calidad de su experiencia universitaria”.

El número de universitarios con discapacidad en las universidades españolas representa el 1,5% del total de estudiantes matriculados, lo que se traduce en un total de 22.190 universitarios en 2018, según la Guía de Atención a la discapacidad de Fundación Universia. 

Estos universitarios exigen una mayor empatía y concienciación de la comunidad estudiantil para evolucionar a un planteamiento “más inclusivo y menos paternalista de su diferencia”, como se destaca en nuestro IV Estudio Universidad y Discapacidad. Y que se trabaja en colaboración con el CERMI, Fundación ONCE, Real Patronato sobre Discapacidad y CRUE.

Y es que, ante esta situación, debemos reflexionar sobre el tipo de educación que queremos para los jóvenes, ya que, como destacaba Sonia Viñas,  “la educación, si no es inclusiva, no es de calidad. Pero, además, la educación, si no es inclusiva, no es educación”.