Última actualización: 12/11/2021

El blockchain es una nueva realidad que promete cambiar para siempre el modo en el que gestionamos nuestra información en el mundo digital. Esta tecnología permite transferir datos y capitales de una manera completamente segura gracias a una codificación y encriptación sofisticada. Conscientes del cambio que esta disrupción puede tener en el mundo de la banca, en Santander queremos ser pioneros a la hora de aplicarlo a nuestros servicios.
 

Es posible que hayas escuchado este término y aún no sepas lo que significa, ni el impacto que podría tener en tu vida. Como sucedió con la incursión de Internet, el blockchain podría cambiar nuestro modo de relacionarnos en el mundo digital de la banca, favoreciendo, entre otros aspectos, a las transacciones, la seguridad  o la gestión de la entidad online. Además, permite una reducción de la burocracia necesaria en las operaciones financieras y mejora la transparencia.

El blockchain o ‘cadena de bloques’ es una tecnología que permite crear redes de dispositivos sin la necesidad de un servidor central y localizado para conectarlos entre sí. Podría decirse que funciona como un libro de cuentas, donde se registran las operaciones de compra, venta o cualquier transacción. Para que se registren estos movimientos deben haber sido aprobados por el resto de participantes de la red de ‘bloques’, es decir, los usuarios de esta tecnología. Y, una vez que la información es ingresada en ellos, ya no podrá borrarse, solo se podrán agregar nuevos registros.

Una alternativa de pago rápida y sin fraudes

Una de las ventajas que presenta esta herramienta es brindar la posibilidad de realizar transacciones económicas de manera rápida y segura frente a posibles fraudes y manipulaciones, ya que utiliza encriptación y codificación. Esto permite a las empresas ofrecer una alternativa de pago más global a los clientes, sin poner en riesgo la seguridad de ambas partes.

Otro gran beneficio que ofrece es la posibilidad de implementar un sistema de negocios totalmente transparente en el que todos podamos ver el estado de las cuentas registradas en “este gran libro”, es decir, qué entra y qué sale, en tiempo real y con un bajo coste.

Pero el blockchain no solo funciona para realizar transacciones económicas. Con esta tecnología se pueden almacenar y transferir documentos e información importante de empresas sin la posibilidad de que alguien pueda acceder a ella sin su consentimiento. Y lo que es más importante: sin el peligro de que sea modificada. Para garantizar la seguridad y la transparencia del voto, en Santander utilizamos esta tecnología para realizar las votaciones en nuestra Junta  General de Accionistas.


Invertimos en seguridad y transparencia

Conscientes del impacto que puede tener el blockchain en el mundo financiero, hemos lanzado el primer bono con tecnología blockchain de principio a fin, lo que supone un primer paso para un posible mercado secundario de valores tokenizados en el futuro. El bono, de 20 millones de dólares, se mantendrá en la blockchain durante toda su vida, hasta el vencimiento.

Para la emisión de este bono, hemos utilizado la blockchain pública de Ethereum, una las tecnologías de código abierto de blockchain más avanzadas. Esto nos ha permitido tokenizar el bono con seguridad y registrarlo de forma permisionada en la blockchain.

“Santander se encuentra a la vanguardia en el proceso de profunda transformación digital del sector financiero y esta operación es un ejemplo. Queremos aprovechar cualquier tecnología que acelere ese proceso para que nuestros clientes progresen y sean más rápidos y eficientes, y el blockchain es una de esas tecnologías”, señaló José García Cantera, director financiero de Banco Santander.

Cada vez son más las personas y las empresas que confían sus datos a esta tecnología por las razones ya mencionadas. Que el blockchain se convierta en una realidad cotidiana es algo que podría darse muy pronto y nosotros, comprometidos con la innovación, queremos contribuir a una tecnología que ayude a crear una sociedad más abierta, conectada y transparente para los ciudadanos.

Te puede interesar